En los últimos meses, las redes sociales se han inundado de noticias donde reportan la desaparición o secuestro de niños, niñas y adolescentes. En muchos de estos casos los menores han sido influenciados por personas mayores que ellos, incitándolos a salir de su casa o abandonar a su familia.
En Nicaragua sacar a un menor de su casa sin el consentimiento de los padres o tutores legales es considerado un delito grave y trae consecuencias de hasta 15 años de prisión.
Según el Artículo 168 de la Ley 641 del Código Penal de Nicaragua, una persona puede ir a la cárcel incluso si el menor de catorce años ha dado su consentimiento. La ley establece claramente que el consentimiento del menor es irrelevante en estos casos.
Los delitos contra la libertad e integridad sexual abarcan una serie de conductas que atentan contra la dignidad, la libertad y la integridad sexual de las personas.
El extraer a un menor de su núcleo familiar es un delito grave y puede ser con fines de:
- Violación
- Abuso sexual
- Acoso sexual
- Explotación sexual
- Proxenetismo
- Trata de personas con fines de esclavitud
Estos delitos son tratados con extrema seriedad debido a su impacto devastador en las víctimas. Las leyes están diseñadas para proteger a las personas y garantizar que los perpetradores enfrenten consecuencias significativas. Es crucial que cualquier caso sospechoso de estos delitos se denuncie a las autoridades competentes para que se investigue y se tomen las medidas apropiadas.
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