El rol de la familia en el desarrollo de los niños y niñas
En el Día Internacional de la Familia se reivindica el papel esencial que ejerce el núcleo familiar en el desarrollo físico, emocional, cognitivo y social de los niños y las niñas.
Un hogar seguro y amoroso brinda la confianza y la seguridad necesaria para que exploren el mundo que les rodea y se desarrollen de manera sana.
Los lazos afectivos que se establecen en el seno familiar les brindan motivación para enfrentar los desafíos que se presentan en su vida. El apoyo de los parientes desarrolla una salud mental positiva en los niños, ayudándoles a construir una autoimagen positiva y a manejar el estrés y la ansiedad.
La familia también desempeña un papel fundamental en el desarrollo cognitivo de los niños al proporcionarles estímulos intelectuales y oportunidades de aprendizaje desde una edad temprana. Las interacciones domésticas, como las conversaciones, los juegos y las actividades educativas, estimulan el desarrollo del lenguaje, la cognición y la creatividad en los niños, preparándolos para tener éxito en la escuela y en la vida.
Asimismo, el hogar es el principal agente de aprendizaje de los niños, enseñándoles los valores, normas y habilidades sociales necesarias para integrarse en la sociedad. A través de la observación y la imitación de las conductas de sus padres y otros miembros de la familia, los niños aprenden a comportarse de manera apropiada en diferentes situaciones sociales, a desarrollar habilidades de resolución de conflictos y a cultivar relaciones interpersonales saludables.